La última revisión de las previsiones macroeconómicas realizada por el Fondo Monetario Internacional (FMI) el pasado 13 de octubre, arroja luces y sombras sobre España. De acuerdo con el informe “Perspectiva Económica Mundial”, nuestro país es la única economía desarrollada que no ve mejorada su previsión para 2020. Sin embargo, podría liderar el crecimiento durante 2021.
Caída del 12,8% del PIB en 2020
El FMI se reafirma en su estimación del pasado mes de junio, de acuerdo con la cual la economía española caerá un 12,8% al cierre de 2020. Concretamente, el cuarto trimestre del año se saldará con un descenso del 10,8%, que supondrá el peor registro entre los países de la zona euro. Le seguirán Portugal y Grecia, son descensos del 9,4% y 9,2% del PIB, respectivamente.
Por el contrario, el resto de las principales economías han visto mejorada su perspectiva, con recortes en las caídas.
La zona euro, en su conjunto, perderá un 8,3% de su PIB, para comenzar a crecer un 5,1% en 2021, un 3,2% en 2022, y un 2,2% en 2023.
En el caso de nuestros países vecinos, Francia y Portugal han visto reducidas la estimación de sus caídas para 2020 en 2,7 y 2,2 puntos, respectivamente.
El FMI destaca, además, que la economía española no recuperará los niveles anteriores a la crisis desatada por la pandemia, hasta el año 2023.
Recuperación del 7,2% en 2021
A pesar de las malas perspectivas para el cierre del presente año, el próximo ejercicio se presenta más alentador para la economía española. El FMI estima que nuestro país crecerá a un ritmo del 7,2%, lo que le permitirá liderar la recuperación de las grandes economías.
De hecho, España es el único país de la zona euro para el que la citada institución ha mejorado las perspectivas de crecimiento. Alemania, por ejemplo, ha visto reducida la estimación de recuperación del 5,4% al 4,2%, Francia ha pasado del 7,3% al 6%, e Italia se recuperará a un ritmo del 5,2%, en lugar del 6,3%.
En lo que concierne a los años siguientes, se estima que España crezca a un ritmo del 4,5% en 2022, 3,4% en 2023, 2,8% en 2024, y 1,4% en 2025.
Aumento del desempleo
Por otra parte, la tasa de paro en España va a continuar en aumento, tanto durante el presente ejercicio, como a lo largo del próximo. El FMI augura que 2020 se cerrará con un repunte del desempleo, hasta representar el 16,8%, tasa que volverá a repetirse al cierre de 2021. No será hasta 2025 cuando el desempleo se sitúe en 14,2%, emulando la cifra de 2019 (14,1%).
Los países de nuestro entorno experimentarán una evolución semejante, aunque con tasas menos abultadas. Alemania cerrará el año con un 4,3% de desempleo, para reducirlo una sola décima el año siguiente.
Francia pasará del 8,9% de 2020, al 10,2% en 2021; e Italia protagonizará una notable subida, desde el 11%, hasta el 11,8%
Incremento del déficit y la deuda pública
El incremento del gasto público para hacer frente a la pandemia podría disparar el déficit fiscal español al 14,1% del PIB, frente al 2,8% de 2019. Se prevé, sin embargo, una progresiva caída durante los años siguientes: 7,5% en 2021, 5,8% en 2022, 4,7% en 2023, y 3,9% en 2024.
Por último, la deuda pública española seguirá la misma senda, hasta alcanzar el récord histórico del 123% en el presente año, superando el 95,5% de 2019. Durante los siguientes ejercicios, se prevé una lenta reducción: 121,3% en 2021, 120,4% en 2022, 119,3% en 2023 y 118,1% en 2024.
2025, sin embargo, será testigo tanto de un alza en el déficit fiscal (4,4%), como en la deuda pública (118,8%).
La zona euro presentará un comportamiento análogo, con un repunte de la deuda pública hasta el 101,1% en 2020, para comenzar a bajar a partir del año próximo y situarse en torno al 94,3%, ya en 2025.