De acuerdo con los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el sector eléctrico, suministro de agua, saneamiento y gestión de residuos incrementó su facturación en un 23,5%, durante el primer semestre del año.
Especialmente destacado fue el mes de junio, en el que se produjo una subida interanual del 46,3%. Una vez realizados los ajustes por el efecto estacional y de calendario, el aumento de la facturación quedó en un 43,3%, con relación al mismo mes de junio de 2020.
Evidentemente, estas cifras deben ser valoradas en su debido contexto. El verano pasado tuvo lugar el confinamiento y las medidas restrictivas, que paralizaron gran parte de la actividad económica.
En consecuencia, casi todos los sectores han experimentado abultados crecimientos interanuales.
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Sin embargo, el sector eléctrico y suministro de agua duplicó la media nacional de crecimiento del resto de sectores, que se situó en el 15,2%, tras los primeros seis meses del año.
Incremento del precio de la electricidad del mercado mayorista
El precio de la electricidad en el mercado mayorista (pool) ha protagonizado un rally durante los últimos meses, superando de forma reiterada sus récords históricos. El pasado 10 de septiembre, el precio medio alcanzó los 152,32 euros por megavatio hora (MWh).
Sobra decir que este factor ha contribuido notablemente a aumentar la facturación del sector. Sin embargo, las causas de la subida de precios son motivo de discusión, y han dado lugar a un debate político, así como la aplicación de medidas de contención.
Actualmente, el Gobierno ha aplicado una reducción del IVA del 21% al 10%. Así mismo, ha suspendido de forma temporal el impuesto de producción eléctrica del 7%.
Incremento del precio internacional del gas y los derechos de emisión
Las centrales de ciclo combinado en España utilizan gas como combustible para la producción de energía eléctrica. El mercado internacional de esta materia prima ha experimentado un fuerte repunte, y el consiguiente encarecimiento de los costes de producción energéticos.
Además, cada empresa de producción de electricidad cuenta con un límite de emisión de dióxido de carbono. Con el fin de extender ese límite para poder seguir produciendo, acuden al mercado de derechos de emisión, el cual también ha visto aumentar sus precios desde enero a julio, en un 158%.
Ola de calor y aumento de la demanda
Por otro lado, el clima en Europa a lo largo del verano se ha caracterizado por sucesivas olas de calor. Esto ha provocado un aumento en la demanda de electricidad, destinada a aparatos de aire acondicionado y sistemas de refrigeración.
Incentivos a las energías renovables y moratoria nuclear
Dejando a un lado los factores ligados al libre comercio, no hay que olvidar el impacto de los costes regulados, en la factura eléctrica.
- Por una parte, los incentivos a las energías renovables suponen cerca del 40% del importe de la factura de la electricidad.
- A esto hay que añadir otro 40%, en calidad de costes de las redes de distribución, y un 20% del déficit tarifario anual.
Por último, la moratoria nuclear española ha sometido al sector energético a una dependencia de las centrales de ciclo combinado y las energías renovables.
En el primer caso, ya hemos comprobado su vulnerabilidad frente a los precios del gas importado y los derechos de emisión.
En el segundo caso, la producción energética aún es cara e insuficiente para satisfacer la demanda del mercado. De hecho, el déficit energético suele ser cubierto con la compra de energía procedente de las centrales nucleares francesas.
En conclusión, el incremento de la facturación del sector eléctrico y el encarecimiento de la luz son el resultado de un conjunto de variables, que requieren un profundo análisis del modelo energético.
