Informe país Australia
Las malas condiciones climáticas (ciclón Debbie) supusieron un lastre para el rendimiento económico durante el primer semestre. La producción de carbón y las exportaciones se han interrumpido debido al cierre de minas y a las mermadas infraestructuras de transportes. El turismo y la agricultura también se han visto afectados. Se espera que el crecimiento del PIB cobre velocidad en lo que queda de año. El mix político buscará impulsar el crecimiento económico flexibilizando la política fiscal y monetaria. Se espera que el gasto y la inversión públicos aumenten debido a los esfuerzos de reconstrucción. Posible aceleración de las exportaciones a un ritmo gradual acorde al aumento de la demanda mundial, a una mayor capacidad de exportación de GNL y a un repunte del turismo. La magnitud de la aceleración dependerá del consumo de las economías domésticas.
Es probable que sea moderado debido al alto apalancamiento (189% de la renta disponible) y al modesto crecimiento salarial. En este contexto, pronosticamos que el crecimiento del PIB mejore en un discreto +2,3% en 2017 antes de acelerarse hasta el +2,6% en 2018. La balanza de riesgos ha mejorado en cierta medida. A nivel externo, la demanda mundial y los precios de los productos básicos han ganado ímpetu desde el año pasado. A nivel nacional, los riesgos son significativos a causa del elevado endeudamiento de las economías domésticas y del desequilibrio del mercado inmobiliario…