De acuerdo con el “Informe de Evaluación de la Calidad del Aire en España”, publicado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), los resultados del último ejercicio han continuado mejorando durante 2021.
Concretamente, la evaluación ha tenido en cuenta los siguientes contaminantes: dióxido de azufre (SO2), dióxido de nitrógeno (NO2), óxidos de nitrógeno (NOx), partículas (PM10 y PM2,5), plomo (Pb), benceno (C6H6), monóxido de carbono (CO), ozono (O3), arsénico (As), cadmio (Cd), níquel (Ni) y benzo(a)pireno (B(a)P).
Cabe destacar que el número de territorios con registros de superación del dióxido de nitrógeno (NO2), así como partículas PM2,5, se ha mantenido estable respecto a 2020. Además, se han logrado reducir las zonas con exceso de niveles de ozono (O3). Todo ello supone un progreso positivo, a lo largo de los últimos dos años.
Mejor calidad del aire, mejores condiciones para la salud
El último informe mencionado ha actualizado su análisis de acuerdo con los cambios realizados en la guía de la Organización Mundial de la Salud en septiembre de 2021.
Estas son las principales conclusiones:
- No hay ninguna zona en la que se supere los valores de monóxido de carbono (CO₂).
- Los niveles recomendados de dióxido de azufre (SO₂) han sido superados en solo el 3% de las zonas.
- Los límites de dióxido de nitrógeno (NO₂) anual y diario ha sido superado en el 62% de las zonas.
- Los valores recomendados de PM10 y PM2,5 anual han sido superados en el 75% y 85% de las zonas, respectivamente.
- Por último, los niveles de ozono (O₂) se han superado en todas las zonas.
Además, el informe ha incluido un apartado destinado a la observación de la composición química de la atmósfera en las zonas rurales. En este sentido, conviene recordar que, el pasado mes de abril, la Comisión Europea presentó una propuesta para reformar la Directiva de Emisiones Industriales. Dicha reforma pone énfasis en el impacto medioambiental de las macrogranjas, responsables de la emisión del 60% del amoniaco y el 43% del metano.
Lectura recomendada:
Principales registros de SO₂, NO₂ y partículas en suspensión
Como ya hemos adelantado al comienzo, no se han superado los valores límite establecidos para el dióxido de azufre (SO₂). En lo relativo al dióxido de nitrógeno (NO₂), se han logrado mantener los registros de 2020, año en el que no se superó el valor límite horario en ninguna zona. Este hito no se había logrado desde el año 2004. Teniendo en cuenta que 2020 estuvo caracterizado por las restricciones para el control de la pandemia, la repetición de las cifras durante 2021 es una gran noticia.
En lo que respecta al límite anual, tan solo se ha registrado una superación, localizada en la estación de la Plaza Elíptica de Madrid. Se repite así el mismo resultado que en 2020.
Por su parte, los límites de partículas en suspensión (PM10), tanto diario como anual, solo fueron superados en la estación de Matadero de Avilés. En el caso de las partículas inferiores a 2,5 micras (PM2,5) no se ha registrado la superación de ningún límite normativo.
Resultados dispares con el ozono (O3)
Debido a las altas temperaturas registradas, así como los niveles de emisión de óxidos de nitrógeno (NOx), se han detectado elevados registros de ozono troposférico (O3). Afortunadamente, se ha logrado reducir el número de zonas con superación de los valores normativos.
Este progreso abarca tanto los valores objetivos para la protección de la salud como los que afectan a la protección de la vegetación.
Se consolida así una tendencia a la baja que ya comenzó en 2020. Concretamente, el año pasado:
- El 14% de las zonas superaron el límite para la protección de la salud, frente al 21% de 2020.
- El 35% de las zonas superaron el límite para la protección de la vegetación, frente al 42% de 2020.
El Pacto Verde, aprobado por la Comisión Europea a finales de 2020, estableció el objetivo de neutralidad en las emisiones de carbono para el año 2050. Las cifras del último “Informe de Evaluación de la Calidad del Aire en España”, aunque son aún modestas, suponen un avance en la buena dirección.