En los últimos 15 años, se ha experimentado un incremento del 50% de las exportaciones españolas. Esto también les ha permitido aumentar su peso en el Producto Interior Bruto (PIB) desde el 26% en 2008 hasta alcanzar el 39% en 2023.
Esta evolución ha colocado a España por delante de economías como Italia y Francia en cuanto a la contribución de las exportaciones en el PIB. En comparación, Alemania aún se mantiene por encima, pero la brecha se ha reducido significativamente desde 2008.
Además, España ha mantenido un saldo positivo en su balanza comercial desde 2011, impulsado por el superávit en los servicios y una mayor competitividad en los bienes. Esto ha permitido al país financiarse de manera más eficiente en los mercados internacionales, y reducir así su dependencia de la deuda externa.
Factores del éxito del incremento de las exportaciones españolas
El éxito exportador de España es fruto de una serie de factores estructurales. Estos han permitido a las empresas mejorar su competitividad y expandir su presencia en mercados internacionales.
Mejora de la competitividad
El coste laboral unitario (CLU), que mide la productividad en relación con los salarios, ha mejorado significativamente durante este período, aunque se ha ralentizado en los últimos años.
Según el Banco de España, la contención de los costes laborales ha sido un factor clave para mantener el ritmo exportador. No obstante, es necesario seguir vigilando este indicador para evitar un deterioro que pueda impactar en la competitividad futura (fuente: Banco de España).
Internacionalización de las empresas
El número de empresas exportadoras regulares, es decir, aquellas que exportan de manera constante cada año, ha aumentado de manera sostenida. Este fenómeno ha supuesto que más empresas, incluidas muchas pymes, se beneficien del mercado global. Como consecuencia, se logra acceder a nuevos clientes y oportunidades de negocio en el extranjero.
El papel de la transformación digital
Las empresas que han sabido adoptar la tecnología digital en sus operaciones han sido capaces de optimizar sus cadenas de suministro, mejorar su eficiencia operativa y ampliar su alcance internacional a través del comercio electrónico y las plataformas digitales.
Sectores líderes en el incremento de las exportaciones españolas
El crecimiento de las exportaciones españolas ha sido impulsado por una diversidad de sectores que han aprovechado su competitividad y la creciente demanda internacional.
Semi-manufacturas
Las semi-manufacturas, como los productos químicos y metálicos, han sido uno de los pilares del crecimiento exportador.
De acuerdo con el Ministerio de Economía, en 2023 este sector representó una parte significativa de las exportaciones españolas. Alcanzando una demanda constante de mercados como Alemania, China y Estados Unidos.
Alimentación
El sector de la alimentación ha experimentado un crecimiento destacado, impulsado por la creciente demanda de productos españoles en mercados clave como Europa, América del Norte y Asia.
Las empresas alimentarias, desde pequeñas bodegas hasta grandes productores, han incrementado su presencia en el exterior, fortaleciendo la marca España en el mercado global.
Bienes de equipo y automóvil
El sector de los bienes de equipo, especialmente el equipo de transporte, ha sido otro de los grandes motores del crecimiento exportador. El sector del automóvil, en particular, ha aprovechado la demanda en mercados europeos y americanos, consolidándose como un referente de la industria exportadora española. La capacidad de las empresas para innovar y adaptarse a las nuevas exigencias del mercado ha sido clave para su éxito.
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Incremento de las exportaciones españolas de servicios
El crecimiento de las exportaciones de servicios ha sido una de las áreas más destacadas dentro del sector exterior español. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística, entre 2008 y 2023, estas exportaciones crecieron un 66% e incrementaron su peso en el PIB del 8,2% al 12,5%.
Este crecimiento ha sido impulsado tanto por el turismo como por los servicios no turísticos, que han jugado un papel cada vez más importante en la economía española.
Incremento de las exportaciones españolas turísticas y no turísticas
En 2023, las exportaciones turísticas representaron el 4,9% del PIB, lo que ha consolidado a España como la segunda potencia mundial en llegadas y gasto de turistas internacionales.
Sin embargo, también es destacable es que los servicios no turísticos, como los servicios financieros, telecomunicaciones y tecnología, ya han superado al turismo alcanzando el 7,6% del PIB, según el Banco de España.
Sectores como las telecomunicaciones, el software, los servicios financieros y la consultoría están experimentando un crecimiento constante en mercados internacionales. De esta manera, representan una oportunidad estratégica para diversificar la economía española.
Este cambio refleja una diversificación en las fuentes de ingresos, que permite a las empresas españolas no depender exclusivamente del turismo. Pues se trata de un sector altamente vulnerable a las crisis globales, como se evidenció durante la pandemia.
Impacto de la recuperación postpandemia en el turismo
El turismo se ha recuperado notablemente tras la pandemia de la COVID-19, con un fuerte impulso desde 2021, hasta retomar sus niveles previos y contribuir de manera significativa al PIB.
La demanda de viajeros europeos y americanos ha jugado un rol clave en esta recuperación, lo que sigue ofreciendo grandes oportunidades para el sector.
Diversificación geográfica de los destinos de exportación
Si bien la eurozona sigue siendo el principal destino de las exportaciones de bienes, con el 55% en 2023, la presencia española ha crecido significativamente en mercados emergentes como Marruecos, Estados Unidos, China y Turquía. En conjunto, estos países absorben el 12,1% de las exportaciones de bienes, casi 4 puntos más que en 2008.
Expandirse en estos nuevos mercados también presenta retos, pues requieren ajustar los modelos de negocio y estrategias de marketing, así como adaptarse a las regulaciones locales. Además, el riesgo geopolítico en algunos de estos países, como Turquía o China, puede influir en la estabilidad de las operaciones a largo plazo.
Riesgos para el futuro incremento de las exportaciones españolas
Por último, hay que recordar que, a pesar del éxito exportador de España, existen riesgos que podrían amenazar el crecimiento en el futuro.
Incertidumbre geopolítica y fragmentación comercial
El entorno geopolítico actual, marcado por tensiones comerciales, políticas arancelarias cambiantes y la fragmentación de los flujos comerciales, podría ralentizar el crecimiento de las exportaciones españolas en los próximos años.
La guerra comercial entre Estados Unidos y China, las políticas proteccionistas y el aumento de aranceles son riesgos que las empresas exportadoras deben gestionar con una planificación estratégica adecuada.
Aumento de los costes laborales unitarios
A nivel interno, el aumento de los costes laborales unitarios (CLU) en España desde la pandemia es una amenaza para la competitividad de las empresas españolas. Si no se controla, este incremento podría reducir la capacidad de las compañías para competir en precio en los mercados internacionales.
Las empresas pueden mitigar estos riesgos adoptando estrategias de diversificación de mercados, invirtiendo en tecnología para mejorar la eficiencia operativa y controlando los costes laborales a través de una mejor gestión de los recursos humanos. Además, la transformación digital sigue siendo un aliado clave para mantener la competitividad y optimizar los procesos productivos.